Una verdadera guerra con declaraciones y desmentidos cruzados es la que envuelve desde septiembre a la Corporación Cultural Municipal de Valdivia (CCM). A las acusaciones de maltratos y persecuciones laborales que apuntan hacia la ex gerente de la entidad, se sumaron los últimos días condiciones inhumanas e insalubles de trabajo que sufren los trabajadores.

En un nuevo capítulo de la crisis en la “casa de la cultura” municipal, este lunes el sindicato de esa repartición emitió una declaración en la que desmintió al directorio de la entidad, Además, los responsabilizó de “minimizar” el conflicto que a la fecha supera su primer mes sin resolverse.

El comunicado indica que “el Sindicato de Trabajadores de la CCM rechaza taxativamente los dichos del Directorio de la institución” en el que se defiende la gestión de la ex gerente interina, Gabriela Arroyo Cifuentes, y donde, según el sindicato, se minimizan conflictos laborales y se responsabiliza a los trabajadores de los problemas con la administración municipal.

El sindicato acusó al Directorio de estar desconectado de la realidad laboral que viven los trabajadores de la CCM. Como ejemplo, señalaron que la Biblioteca Municipal lleva dos años sin calefacción y que las condiciones en la Casa Prochelle I son insalubres, con plagas de murciélagos y ratones que han sido registrados en video por los funcionarios. “Fuimos los propios trabajadores quienes exigimos que se hiciera algo”, recalcaron.

A ello sumaron que trabajadores de la CCM deben comer “en salas donde anidaron, defecaron y orinaron murciélagos (…); el submarino es ocupado de baño por gente alcoholizada, los hedores son insoportables y la seguridad no es mucho mejor (…); el espacio que ocupa la Escuela de Danza por décadas es un agujero no apto para alumnas, docentes y administrativos”, recapitularon.

Polémica sigue

En su respuesta, los trabajadores sindicalizados desmintieron que la Inspección del Trabajo haya desestimado su denuncia por irregulares en el trato laboral, como señaló el Directorio. “Queda claro: los hechos existieron, no fueron desestimados y están lejos de ser invenciones. Son reales”, afirmaron en el comunicado. Según el sindicato, la Inspección sugirió la adopción de medidas preventivas para mitigar los riesgos psicosociales en el ambiente laboral.

El sindicato también criticó duramente una carta firmada por 50 personas, incluyendo un miembro del Directorio, que calificaba a los trabajadores de “desobedientes e insurrectos”. Al respecto, señalaron que esta acción no contribuye a la resolución de la crisis, sino que refuerza los ataques hacia ellos.

“Nos duele profundamente que quienes antes defendieron la justicia y la dignidad del trabajo, hoy se alineen con los intereses del poder, sin considerar el daño que nos están haciendo”, denunciaron.

Finalmente, el sindicato expresó su desacuerdo con que el comunicado del Directorio se haya emitido en nombre de la Corporación, ya que no representa a los trabajadores. “Esta es una post verdad. Todo lo sucedido es real, y nos sentimos vulnerados, asustados y perseguidos por esta administración”, concluyeron.

El sindicato subrayó que continuarán apelando a todas las instancias pertinentes para defender los derechos de los trabajadores de la CCM y exigir condiciones laborales dignas.